De tanto caminar tras de ti hice mías tus huellas... Y al
final quede solo en el camino... De tanto contemplarte mientras dormías hice míos
tus sueños... Y desperté en medio de esta pesadilla... De tanto secar tus ojos hice
mías tus lagrimas... Y me quede solo con el dolor... De tanto decir tu nombre
te grabaste en mi piel... Y me quede sin voz y con el alma marchita... De tanto
amarte te creí enamorada... Y me quede desilusionado y con el corazón roto...
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