El día se tornó gris como reflejando mi corazón… La lluvia
arraso con todo a su paso como mi soledad… El viento se volvió tornado como mis
palabras… Los mares desataron su furia como mi tonto orgullo… El silencio se
convirtió en estruendo como mi lamento… La luna se escondió dejando todo en
obscuridad como mi esperanza… Hablé con Dios y él me dijo que solo vivía en el
mundo que yo elegí… Un mundo donde te perdí…
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