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miércoles, 17 de junio de 2020

SON SILENCIOS

Son silencios conocidos y realidades abstractas de una mentira que nos lastima… Decir que ya no existe nada entre tú y yo… Hacer que el mundo crea que nuestro amor ya murió… Pero peor aún, repetir tantas veces esas palabras, que hasta nosotros nos las creímos… Sufrir sin saber por qué, despertar con los ojos mojados y no comprender la razón… Sentir que nos falta un pedazo del corazón y no comprender el motivo… Sentir que nuestra alma vaga, por los laberintos de la eternidad… Tener los sentidos adormecidos y la conciencia completamente dormida… Intentar gritar tu nombre al viento y no recordar el sonido exacto… Hacer de mis palabras, algo semejante a una onomatopeya, que se repite una y otra vez o se emiten sin sentido para el ser… Buscar la verdad de mis días… Buscar él porque de mi existencia… Vislumbrar entre sueños una imagen lejana… Recordar un perfume que nunca se invento… Abrazar el vacío de un cuerpo que jamás existió… Saber que todo lo que creí mi mundo, hoy no es más que un fragmento irreal del tiempo… Amar una mujer, que no se si existe o solo es producto de mi imaginación… Extrañar el sabor de unos labios, que no se si en verdad me besaron… Desear el calor de un cuerpo, que quizá nunca fue mío… Y tú, ahí, frente a mí, callando lo que sientes es solo tu verdad… Dejando escapar el brillo de tus ojos, que de alguna forma me son tan familiares… Ver cómo te aproximas a mí, tan segura de ti misma y con toda la naturalidad del mundo, como si ya tuvieses la confianza o la seguridad de que caeré a tus pies… Y por algún motivo ajeno a mi razón, mis instintos me llevan a responder de manera intuitiva o como un acto reflejo, con una predisposición completa a tu sonrisa, a tu mirada, a tu calor, a tus besos, a tu pasión… Y en un segundo mágico, solo despierto de mi ignorancia y de mi conciencia aletargada para exhalar la palabra amor… Porque aunque mi mente lo olvide, mi corazón y mi alama siempre tendrán la memoria divina de tus formas… Para amarte por el tiempo etéreo, que la divinidad nos otorgue… Amarte en el principio de la existencia fue tan normal y amarte por la eternidad es sencillamente parte de mi destino… Te amo… Y sabes que es simplemente por ser tú…

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