Esta noche quise escribir algunos versos con la elegancia de
los poetas de antaño… Rebusque entres mis palabras aquellas que hicieran gala
de la grandeza de este sentimiento y que ya hacen escondidas en el rincón de
mis escritos… Cerré los ojos para tener alguna visión casi mitológica de
nuestro amor… Me tome el atrevimiento de buscar entre tus cosas para abrí tu
perfume favorito y así tenerte un poco más presente junto a mí… Apague casi
todas las luces de la habitación a excepción de la de mi pequeña lámpara para
quedar casi en penumbras… Puse de fondo a volumen moderado una de nuestras
muchas canciones… Y por más que lo intente te juro que definitivamente no pude
engañar a mis sentidos… No le pude mentir más al latir vehemente de mi corazón…
No pude callar los lamentos de dolor por el cual mi alma se queja todas las
noches al no tenerte… No pude evitar que mis ojos derramasen un par de lágrimas
más, que junto a todas las que ya llore por tu ausencia ya dan vida al legendario
rio Nilo del gran Egipto… Es como un azar de la ironía, llegar al final del día
ya casi vencido… Dejar caer mi cuerpo en nuestro lecho y comenzar a remembrar
todos nuestros momentos juntos… Sin más sentir ese algo que recorre todo mi ser
así como un hechizo o elixir de vida, recobrar todas mis fuerzas esbozar una
sonrisa y sentir que podre enfrentar fácilmente una nueva jornada… Las voces
comienzan a danzar en mi cabeza, tu risa, las carcajadas de nuestro hijo, los
bailes que inventamos y las promesas que cobraron vida… Cual excéntrico enamorado
comienzo a dialogar conmigo mismo, comienzo a murmurar algunas locuras, en voz
alta digo cuanto te amo y comienzo a enamorarme aun más de ti… Digo tu nombre y
el sonido de mi voz evoca tu presencia en mis sueños donde te abrazo con la fuerza
del universo, te tomo entre mis manos y te hago como cada noche la misma
pregunta… Me amas…? Sientes la dicha de estar vivos en el mismo tiempo y
espacio… Estas acaso consciente de que muy pronto todo ya no será solo un sueño
y que al fin podre decirte mirándote a los ojos cuanto te amo… Si… Porque te
amo… Con tu forma de mover tu cabello al viento… Con la rebeldía de tu ser que
me inspira a ser un gigante en este planeta… Te amo con tus debilidades,
incluso aquellas que alguna vez me lastimaron… He hicieron que te vea ya no tan
inalcanzable, pero si vulnerable para proteger y cuidar, no solo con mis manos
sino con todo mi corazón… Te amo y si aun no comprendes el por qué… Tendrás que
esperar otro día para seguir con mi explicación… Pero por el momento solo diré
que te amo… Te amo… Simplemente por ser tú…
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